El sitio de Porto Ferrajo fue un intento francés de forzar la rendición del pueblo fortificado toscano de Porto Ferrajo —actualmente conocido como Portoferraio—, situado en la isla de Elba, tras la ocupación de la mayoría de Toscana en 1801 durante las guerras revolucionarias francesas. Las fuerzas francesas superaban a la guarnición toscana en número, pero esta última recibió una ayuda considerable por parte de la Marina Real británica, la cual controlaba el mar Mediterráneo y se aseguró de que le llegaran provisiones y de interceptar los refuerzos franceses.