El parque de la Aguja[1] (en catalán, Parc de l'Agulla) es un lago artificial situado en la ciudad española de Manresa que se empezó a construir en 1966 haciendo una presa y no se llenó hasta el noviembre de 1974. Tiene una superficie de 0,64 km², una profundidad media de 2m (máxima de 4) y puede almacenar 200.000 m³ de agua.